La comunicación también es imagen y por ello vamos a tratarla en este tip. Concretamente la comunicación no verbal, puesto que es la que mayor relevancia posee.
El saludo y más concretamente el apretón de manos, es un elemento que puede denotar muchas cosas y forma parte de la famosa primera impresión.
Lo primero en lo que debes hacer hincapié, es en la posición de tu palma. Dar la mano con la palma hacia arriba puede indicar sumisión e inferioridad. Bien es cierto que puede señalar humildad y cercanía, pero solo cuando se trata de alguien conocido, aun así, no es la mejor idea hacerlo.
Por contra, ofrecer la mano con la palma hacia abajo transmite superioridad y autoridad, ya que también obligarás a la otra persona a darte la mano con la palma hacia arriba.
Ahora bien, si lo que deseas es proyectar respeto e igualdad ante la otra persona, simplemente ofrece la palma de la mano en posición vertical (recta) y mantenla así.
Otro aspecto a tener en cuenta es la fuerza que empleas en dicho saludo. Se llama apretón de manos por algo, así que que procura darlo firme y con decisión. Pero ojo, no es una competición por saber quién apreta más, no te pases queriendo alardear de tu fuerza hercúlea.
Ni que decir tiene que por supuesto no debes dar la mano sin fuerza. Lo único que mostrarás será debilidad, inseguridad, desempeño… En definitiva, además de no transmitir confianza, nadie quiere tener nada que ver con personas sin alma.
Si en fuerza hablábamos de un término medio, en la duración es más de lo mismo, lo ideal sería no pasarse de los 3 segundos.
Agarrar el hombro o codo de la otra persona, puede expresar alegría y complicidad hacia ella. Aunque lo apropiado es limitar esos gestos a únicamente personas de mucha confianza.
Hasta aquí el tip de esta semana, de nuevo, más largo de lo que debería ser y eso es porque quiero lo mejor para tí. Espero que a partir de ahora te tomes muy en serio el apretón de manos.
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